Una vez más la historia se repite… vuelve la ya conocida por todos Crisis Postvacacional.
Una moderna enfermedad, no considerada como tal, de la que todos hablamos y de alguna manera padecemos. Provoca fatiga, irritabilidad, ansiedad, desgana y hasta insomnio, cuando llega la hora de regresar a las obligaciones tras un período de vacaciones. Los expertos lo llaman síndrome postvacacional y según dicen afecta incluso a las relaciones de pareja.
Se comenta, como buena noticia, que puede prevenirse con una dieta equilibrada, algo de ejercicio, dormir un mínimo de 7 horas... En fin, un mito que creamos porque nuestra condición de humano no nos permite valorar lo que tenemos hasta que vemos que se pierde.
Según http://www.lavanguardia.com “El miedo al paro ha reducido este sentimiento y según una encuesta el 80% está contento de volver al trabajo.”
Una vez más necesitamos ver peligrar nuestra integridad para hacernos más sensatos y dejar de sufrir cosas banales. Seamos positivos, al fin y al cabo asistir todos los días al trabajo no es malo, el que no lo hace también se queja por ello.
Los humanos tenemos el defecto de hacer de la vida una rutina que nos impide ser conscientes del momento presente, supongo por cuestión de economía o de tiempo, porque resulta más rápido que estar pensando en cada uno de nuestros movimientos y en cada una de nuestras palabras ante una situación.
Debemos motivarnos solos, que es lo que nos cuesta, y tratar de ver las cosas de forma práctica y positiva, recordándonos siempre que es mejor sentirse agradecido ante la oportunidad de agenciarnos de un periodo de tiempo lleno de excesos donde no contaran los horarios, pero sabiendo que una vez consumados, continuaremos con nuestra habitual forma de vida.
A mi modesto parecer propongo utilizar como otra alternativa de terapia los placeres que nos proporciona el sexo, la seducción… Imaginar es una buena motivación para afrontar el día con buen sabor de boca. Dejemos que fluyan con ingenio y creatividad nuestras más bajas pasiones con la libre alternativa de ejecutarlas a solas, en compañía o simplemente en nuestra ilusión.
¿O a ti no te seduce la idea sólo con pensarlo?

No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por vuestra participación en mi Blog. Por querer compartir conmigo la perseverancia que mantiene la pasión y dar ese toque sensual necesario a la vida cotidiana.
Solo contestaré a comentarios que crea que lo requieren, pero aprovecho para agradeceros tan grato alimento. Saludos.